Un rincón de sabor y excelencia en Arica.

Siete de la mañana y el sol apenas asoma en Iquique. Por motivos personales mi destino este día es hacia la puerta norte de nuestro país Arica.
Ya por Quillagua caigo en cuenta que llegaré a la hora de almuerzo, una excelente excusa para conocer un poco de la gastronomía de Arica.
Ya instalado en la vecina ciudad me dispongo a buscar algo, llama la atención una publicación en Facebook de un local cercano, las coordenadas: Galvarino Riveros 1109, centro de la ciudad, en una esquina el Café Restaurante Republica de Arica, un espacio al más puro estilo retro con un gran salón principal el que está provisto de una barra de punta a punta, llena de licores y vinos... Nos recibe Jaime, un amable garzón que nos dirige a nuestra mesa, la nos espera con pancito amasado en el lugar y pebre. Me acompañan 3 personas más, estamos hambrientos luego del viaje, nos decidimos por jugos naturales de mango y maracuyá y, por supuesto,el menúque se ve prometedor: Niguiri 3 tiempos de entrada, una versión interesante del clásico japonés. El plato presentaba 3 tipos, el primero de salmón bañado en salsa de Maracuyá con toques de ciboulett, el segundo de lenguado cubierto en salsa Acevichada y aromas a Merquén y el ultimo era de Atún en salsa Teriyaqui y semillas de Sésamo, la verdad es que la untuosidad del arroz acompañado de estas tres proteínas marinas y las salsas que acompañaron a cada una de estas versiones es sublime, un arcoíris de sabores en un pasa boca de asimilación simple, la frescura del pescado se mezcla con lo refrescante de las frutas de cada dress.
El palto de fondo es un contraste definitivo, estofado a la olla de asado de tira con arroz. Rústico, consistente y con un sabor increíble, la carne se deshacía en la boca, con toques de albahaca en su guisado. Cerca de 250 gramos de carne con sus huesos los que entregan el sabor necesario para este corte, acompañado de un arroz graneado perfecto. Sin pretensiones una excelente versión de un plato del Chile interior. Quizás habría considerado un elemento cremoso como tercer sabor, pero más allá de eso el plato es buenísimo.
Por último un biscocho con capas de chocolate y mango en una presentación delicada. Para mi gusto, muy poquito, pero eso también es por que soy hambriento.
En resumidas cuentas un lugar agradable, excelente atención, cocina refinada pero con lo necesario para satisfacer a comensales más golosos.Absolutamente recomendable, en las noches me indican que la carta es más variada y con tragos para pasar un rato de esparcimiento, la excusa perfecta para volver.
Consumo PP: 8 mil pesos.
6.5 es mi nota para este excelente local fuera de nuestra ciudad.